El 4 de febrero de 1992, para los aliados del entonces presidente venezolano Carlos Andrés Pérez, el periodista Arturo Vilar Esteves se convirtió en uno de los “héroes” de la jornada que evitó la caída del gobierno de Pérez.
Vilar, quien entonces era reportero de guardia de Venevisión, autoproclamado demócrata y honrando además la amistad que había entre Pérez y Gustavo Cisneros, dueño del canal, no solo le ofreció su automóvil, celular y apartamento a Pérez, para que se resguardara.
El periodista fue uno de los encargados de preparar el estudio de televisión desde donde el entonces mandatario envió un mensaje al país condenando el golpe de Estado comandado por Hugo Chávez y llamando a la rendición de los sublevados.
Adicionalmente, Vilar grabó con una cámara portátil otros mensajes de Pérez en el Palacio de Miraflores y entrevistó a algunas de las personalidades políticas que el 4F, una vez controlado el alzamiento, se acercaron al Palacio de Miraflores a manifestar su respaldo a Pérez.
Entre esas personalidades se encontraban el entonces gobernador de Caracas -designado por Pérez-, Antonio Ledezma, y el diputado Raúl Andrés Leoni, hijo del fallecido expresidente Raúl Leoni.
El periodista Arturo Vilar entrevista a Antonio Ledezma y a Raúl Andrés Leoni, el 4 de febrero de 1992, en el Palacio de Miraflores, en Caracas.
En noviembre de 2022, Ledezma y Leoni (hijo) volvieron a compartir escenario, en Miami, en la presentación del libro “Carlos Andrés Pérez: el presidente que murió dos veces”, escrito por Ledezma.
El discurso de un venezolano en la presentación de un libro en Estados Unidos en el año 2022.
Allí, Leoni (hijo), al pronunciar un discurso, confesó su amistad de varias décadas con Ledezma, cuya esposa, “Mitzy” Capriles, ha llegado a reconocer públicamente su admiración hacia la familia Leoni y la proximidad que tuvo con “Menca” de Leoni, esposa del expresidente.
Arturo Vilar se desempeñó como jefe de prensa de la alcaldía del municipio Libertador de Caracas, cuando Ledezma era el alcalde (1996-2000), ocupándose tanto de actividades de gobierno, como de las que realizaba el político en calidad de dirigente del partido AD.
La amistad de Vilar con la exfiscal Luisa Ortega Díaz, a la que el periodista acompañó en su huida de Venezuela en 2017, en paralelo a la vinculación de Vilar con Antonio Ledezma, es un ejemplo de los hilos que unen al exalcalde con su otrora carcelera.
Antiguos conocidos recuerdan que Vilar trabajó además en Omnivisión Multicanal, cuando el canal era presidido por Ítalo del Valle Alliegro, general retirado que había servido con lealtad a los gobiernos de AD.
Es comprensible que alguien como Tito Figueroa Atías, quien antes ha fungido de testaferro para Arturo Vilar, y quien se asoció en EE.UU. con Alfredo Ojeda -otro personaje vinculado a AD-, haya recibido financiamiento de los ahora fugitivos José y Chamel Gaspard Morell.
Se trató de préstamos de los Gaspard para un negocio de compra, remodelación y reventa de inmuebles en EE.UU., con la participación de otros inversores, que desencadenaron acusaciones contra Figueroa, Ojeda y sus respectivos hijos, por presunto fraude.
Vale recordar que el padre de los Gaspard Morell era compadre y socio de Sofía Fernández, hermana de “Menca” de Leoni. La familia Gaspard se benefició durante años de las concesiones madereras que recibieron del gobierno de Leoni y de otros gobiernos de AD.
La relación de los Gaspard con los Leoni Fernández ha sido tan próxima, que los primeros bautizaron a una de sus empresas con el nombre de Aserradero El Manteco, en honor a la población natal de el expresidente Leoni.
La amistad de la familia Gaspard con los Leoni Fernández, le permitió a los Gaspard congeniar también con Antonio Ledezma, de cuya esposa se convirtieron en vecinos en el Oceanaire, un edificio en la zona oeste de Panamá.
Eso después de que los Gaspard fueran aventajados contratistas de las administraciones de Ledezma como gobernador y alcalde en Caracas.
Incluso a mediados de los 90’s, cuando “Antonio”, el padre de los Gaspard, fue investigado por el congreso venezolano, respecto a las concesiones madereras recibidas, la presencia de Ledezma como senador también habría sido beneficiosa para que la investigación no prosperara.
Los fondos prestados por los Gaspard para los proyectos en EE.UU., por si fuera poco, se canalizaron a través de paraísos fiscales, mediante firmas fantasma, y han encendido las alarmas sobre una posible trama de blanqueo, reveló @josepgonzalez687.