En 2012, la detención del venezolano Tito Figueroa por haber cometido un pequeño hurto en una tienda de mejoras para el hogar Lowe’s en Kendall, al suroeste de Miami, fue quizás un asomo de lo que serían sus años siguientes.
No está claro si fue Figueroa quien arrastró a su familia o si su familia arrastró a Tito Figueroa, hasta lo que luego se convertiría en una espiral de fraudes, que terminaron por perjudicar a inversores, prestamistas, familiares y hasta a la ciudad de Coral Gables.
Entre esos prestamistas se encontraban los ahora fugitivos hermanos José y Chamel Gaspard Morell, quienes en su empeño por canalizar fondos opacos, usando paraísos fiscales y el sistema financiero estadounidense, terminaron siendo responsabilizados de los entuertos de Figueroa.
En un completo desastre se convirtió lo que parecía ser un prometedor negocio de compra, remodelación, alquiler y reventa de viviendas, en el que participaron Figueroa, su padre, además del actor Daniel Alfredo Ojeda y su progenitor, Alfredo Ojeda.
Varias de las remodelaciones que debía hacer Figueroa no se hicieron, mientras que los fondos de los préstamos hipotecarios y del financiamiento que recibió de inversores, entre los que se encontraban familiares de su padre, fueron malversados.
Uno de los casos más dantescos fue el de una casa, considerada de valor histórico para Coral Gables, por formar parte de un conjunto de propiedades que mantienen la arquitectura centenaria original de la ciudad.
Gracias a inversores, la casa fue adquirida en 2014 por Figueroa, por más de medio millón de dólares, e hipotecada a los Gaspard a comienzos de 2017, por una cifra ligeramente menor.
Figueroa, sin embargo, desmanteló la casa, dejándola en ruinas y sin completar la remodelación, además de no responder por el dinero de los inversores y solo pagar el préstamo parcialmente.
Aunque la suscrita con los Gaspard se lo impedía, Figueroa realizó una segunda hipoteca fraudulenta de la propiedad en 2018, a familiares de su padre, a quienes también terminó estafando.
Para la ciudad de Coral Gables, no obstante, el papel de los Gaspard y demás prestamistas fue el de cómplices de Tito Figueroa, reveló @josepgonzalez687.