Víctor de Aldama, Patricia Ramos y la peluquera colombiana: un triángulo que sacude al Gobierno español con acusaciones escandalosas

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Los nombres de Víctor de Aldama y su ex esposa, Patricia Ramos, resuenan en la esfera pública española, pero no por las razones que desearían. Atrás quedaron los tiempos en que sus vidas de opulencia, marcadas por Ferraris, Porsches, relojes de lujo y mansiones, eran la envidia de sus seguidores en Instagram. Hoy, ambos se encuentran en el ojo del huracán, protagonizando las tramas de corrupción que mantienen en vilo tanto a Ferraz como a Moncloa.

Sin embargo, la entrada en escena de una peluquera colombiana, actual pareja sentimental de Aldama, ha transformado el dúo en un trío, añadiendo un giro inesperado a la historia, donde las rupturas y los desamores se convierten en ventanas indiscretas que exponen secretos celosamente guardados, según reporta El Economista.

Aldama, de 46 años, ha emergido como el personaje más buscado en internet tras desatar un terremoto político al declarar ante la Audiencia Nacional, señalando directamente al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, a José Luis Ábalos, a Koldo García, así como a otros ministros y altos cargos del PSOE.

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Tras dos horas de comparecencia voluntaria como investigado, el juez Santiago Pedraz decretó su libertad con medidas cautelares el jueves 21 de noviembre por la noche, poniendo fin a su estancia en prisión provisional desde el 10 de octubre por un presunto fraude de 182 millones de euros en el IVA de los hidrocarburos. Tras mes y medio entre rejas, Aldama decidió romper su silencio y sus revelaciones han puesto en jaque al Gobierno.

Sin presentar pruebas concretas hasta el momento, Aldama amenaza con arrastrar consigo a parte del Gobierno y a numerosos miembros del PSOE. Mientras los aludidos se apresuran a anunciar querellas, defendiéndose de las graves acusaciones del que consideran un nuevo “Pequeño Nicolás”, Aldama advierte que si Sánchez exige pruebas, no tardará en presentarlas.

Según publicó Vozpópuli, Aldama se ha separado de Patricia Ramos, con quien tiene una hija de 6 años, y mantiene una relación con una peluquera colombiana. Ramos, por su parte, también se encuentra implicada en la trama de las mascarillas, siendo considerada por la UCO como una pieza clave en el blanqueo de capitales.

De abogado prominente y cónsul al escándalo

Víctor de Aldama

Víctor de Aldama, otrora conocido por sus ostentosas fotografías junto a Pedro Sánchez, se ha transformado en el protagonista de una tragicomedia que parece sacada de una película de Berlanga. Este abogado y empresario, amante del lujo y de ética cuestionable, acostumbrado a las transacciones millonarias, se enfrenta ahora a las consecuencias de sus acciones, revelando secretos tras su paso por prisión. El encierro, según parece, le hizo añorar la libertad, su Ferrari y las visitas al salón de belleza de su nueva pareja.

Aldama encarna a la perfección un personaje berlangiano trasladado a 2024. Su comportamiento grotesco y su historia rocambolesca hubieran servido de inspiración a cualquier guionista, sin necesidad de la genialidad de Rafael Azcona. Cónsul honorario caído en desgracia, Aldama ha decidido no hundirse solo, arrastrando en su caída a todo aquel que se cruce en su camino. Se ha llegado a decir que la trama que envuelve a Aldama y su ex esposa supera en complejidad a la mismísima “Juego de Tronos”.

Antes de que el juez Pedraz pudiera dar por concluida la instrucción, Aldama decidió revelar todo lo que sabe, con el ímpetu de un concursante de Eurovisión. Su relato incluye contratos ferroviarios en México, comisiones exorbitantes y nombres que resuenan con fuerza en los pasillos de Moncloa. Mientras tanto, Pedro Sánchez, visiblemente ofendido, se refiere a Aldama como “personaje” en un tono que oscila entre la indignación moral y el desdén, recordando a las sobremesas de “Sálvame”, programa que el presidente y su amigo José Pablo supuestamente planean resucitar en TVE para desviar la atención del escándalo.

Lujo, negocios turbios y un sainete antes del vendaval judicial

Víctor de Aldama

La vida de Víctor de Aldama ya era digna de un sainete incluso antes de que la Audiencia Nacional pusiera el foco sobre él. Su patrimonio incluía un Ferrari Portofino negro, una mansión en la exclusiva urbanización de Ciudalcampo y una ex esposa involucrada en operaciones financieras tan turbias como el controvertido máster de Cristina Cifuentes.

Patricia Ramos, coprotagonista de esta tragicomedia, administraba empresas con nombres tan sugerentes como Martina 2017 Real Estate SL y Deluxe Fortune SL. El Porsche Macan GTS del matrimonio, valorado en más de 100.000 euros y con asientos de cuero, era un recordatorio constante del glamour que rodeaba a las comisiones presuntamente ilegales.

Como si la situación no fuera ya suficientemente compleja, Aldama ha iniciado una nueva relación sentimental con una peluquera colombiana, quien, según los rumores, se ocupa tanto de su imagen personal como de sus coartadas. Este nuevo personaje aporta un toque kitsch a la trama, como si Berlanga hubiera decidido incluir a Bárbara Rey en el film “La escopeta nacional”.

Patricia Ramos, por su parte, no se queda atrás en esta competición de situaciones esperpénticas. La UCO la señala como pieza fundamental en el blanqueo de capitales de la trama. Su declaración ante el juez, alegando desconocimiento sobre el origen del dinero acumulado en sus cuentas, resultaría conmovedora si no fuera por el ostentoso Porsche que figura a su nombre. La elección de nombres familiares para sus empresas, como Martina 2017, en honor a su hija, añade un matiz de telenovela a la historia. La adquisición de una casa dúplex y dos plazas de garaje con fondos presuntamente fraudulentos completa el retrato de esta mujer, a quien algunos ya comparan con la Bonnie Parker de las transferencias bancarias.

La misteriosa peluquera y el nerviosismo en Moncloa

Víctor de Aldama Delgado

El giro argumental más sorprendente de esta historia lo protagoniza la peluquera colombiana, cuya identidad se mantiene en el misterio. Si esta trama fuera el guion de una película de Berlanga, ella sería el personaje que entra en escena en el último acto, pero que acapara toda la atención.

Sus tijeras, antes dedicadas únicamente a cortar flequillos, ahora parecen tener un filo más cortante, dispuestas a romper los lazos que unen a Víctor con su exesposa, desencadenando una oleada de secretos impulsados por el despecho y la venganza. En las conversaciones de café, la figura de la peluquera ya se ha convertido en leyenda. Mientras tanto, Aldama luce su nuevo look con orgullo, como si el cambio de estilista simbolizara su transformación en delator estrella.

En el trasfondo de esta tragicomedia, el Gobierno de Pedro Sánchez se tambalea, presa del nerviosismo ante la posibilidad de que el apuntador les haya proporcionado un guion erróneo. “¿De qué nombres hablan?” repiten los portavoces de Moncloa, con la expresión de quien encuentra una carta inesperada y perturbadora en su buzón.

El presidente, siempre dispuesto a exhibir una sonrisa y pronunciar discursos optimistas, se ve ahora obligado a presentar querellas. Ha calificado las acusaciones de Aldama, aún sin pruebas, como una “menuda inventada”. Sin embargo, en los pasillos de Ferraz, varios ministros se apresuran a revisar sus coartadas, conscientes de que, en esta obra teatral, cualquiera podría ser el siguiente en subir al escenario.

Víctor de Aldama y Patricia Ramos se han convertido, por el momento, en los bufones de esta tragicomedia nacional. Él, con su retórica desafiante y sus promesas de presentar pruebas “contundentes”. Ella, con su imagen de madre abnegada y sus cuentas bancarias congeladas. Mientras tanto, España contempla esta versión moderna de “La escopeta nacional” con una mezcla de fascinación y repulsión, preguntándose qué nuevo giro de guion les deparará el próximo capítulo.

El alto nivel de vida de un empresario multifacético

El empresario Víctor de Aldama disfrutaba de un elevado nivel de vida, rodeado de todo tipo de comodidades. Residía junto a su entonces esposa, Patricia Ramos, y su hija Martina, de seis años, en una espectacular vivienda ubicada en la exclusiva urbanización de Ciudalcampo, en Alcobendas, al norte de Madrid, enclavada entre los municipios de San Sebastián de los Reyes y Colmenar Viejo. Conducía un Ferrari Portofino negro, registrado a nombre de una sociedad ajena al “caso Koldo” pero arrendado a MTM 180 SL, empresa de la que Aldama es titular.

Abogado y empresario de profesión, nació en Madrid en 1978. Previamente, había desempeñado el cargo de asesor de Air Europa y presidido el Zamora CF, un club de fútbol que adquirió cuando se encontraba al borde de la quiebra. En junio de 2024, vendió sus acciones a Javier Páez, sobrino del expresidente del Betis, Manuel Ruiz de Lopera, y actual presidente del club.

A lo largo de su trayectoria, Aldama ha estado vinculado a diversos sectores empresariales, incluyendo el inmobiliario, la hostelería, la educación, la publicidad, la tecnología, los servicios médicos y la automoción, entre otros.

Asimismo, intentó adquirir otros clubes de fútbol como el Cádiz, Córdoba, Murcia y Xerez. Su empresa, Soluciones de Gestión y Apoyo a Empresas SL, experimentó un crecimiento exponencial en 2020, registrando una facturación récord de 53,1 millones de euros tras dos años de inactividad e ingresos prácticamente nulos.

En junio de 2021, Víctor de Aldama fue nombrado cónsul honorario de Georgia en Zamora, cargo del que fue destituido en marzo de 2024 tras ser imputado. Previamente, también había ejercido como cónsul honorario de España en el estado de Oaxaca, México.

La Inocencia de Patricia Ramos y las revelaciones de Aldama

En mayo de 2024, Patricia Ramos compareció ante la Audiencia Nacional con el objetivo de desbloquear dos de sus cuentas bancarias, embargadas desde febrero por orden judicial. Durante su declaración, Ramos aseguró con aparente ingenuidad desconocer el origen del dinero acumulado en dichas cuentas, como si las abultadas cifras hubieran aparecido de forma milagrosa. Sin embargo, sus argumentos no lograron convencer al magistrado, quien mantuvo el bloqueo de las cuentas. A pesar de ello, el juez autorizó el pago de los gastos corrientes, reconociendo que incluso los presuntos implicados en casos de corrupción deben hacer frente a sus obligaciones cotidianas.

Por su parte, Víctor de Aldama, quien parecía encaminarse hacia una jubilación tranquila rodeado de lujos, experimentó un cambio radical tras su breve estancia en prisión. Abandonó sus charlas motivacionales para enfrascarse en largas sesiones con la fiscalía, no precisamente para compartir consejos de liderazgo, sino para desvelar una extensa lista de nombres relacionados con el PSOE, algunos de ellos tan próximos al Gobierno que han provocado inquietud en el entorno de Pedro Sánchez.

Según consta en el Boletín Oficial del Registro Mercantil (BORME), Patricia Ramos, ex esposa de Víctor de Aldama, ha ocupado diversos cargos empresariales a lo largo de los años. Desde octubre de 2017, es administradora única y socia única de Martina 2017 Real Estate SL. Anteriormente, fue administradora única de Original London SL entre octubre de 2015 y junio de 2018, apoderada de Businesscity SL de abril de 2014 a mayo de 2015 y administradora única de Deluxe Fortune SL de septiembre de 2012 a marzo de 2013.

La UCO señala a Ramos como pieza clave en el blanqueo

Patricia Ramos y Víctor de Aldama

La Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil considera que Patricia Ramos, ex esposa de Víctor de Aldama, desempeñó un papel fundamental en el blanqueo de capitales investigado. Según el informe de la UCO, Aldama habría transferido 730.000 euros a su entonces pareja, procedentes de las comisiones obtenidas por la empresa Soluciones de Gestión. Con estos fondos, Ramos habría adquirido una vivienda, dos plazas de garaje y un Porsche Macan.

El informe detalla que “partes de esos fondos, provenientes de los contratos de los investigados, se destinaron a la adquisición de una vivienda dúplex y dos plazas de garaje por un valor de 417.551 euros”, ubicados cerca de IFEMA y del Hospital Isabel Zendal en Madrid. Además, Ramos, utilizando también fondos de la mercantil MTM 180 Capital, compró uno de los vehículos incautados durante el registro policial: un Porsche Macan GTS del que figura como titular. El valor de mercado de este vehículo ronda los 112.272 euros.

La UCO también sostiene que Ramos, a través de la sociedad Martina 2017 Real Estate SL, “habría comprado un inmueble por valor de 2 millones de euros a una sociedad portuguesa” denominada Atmosferaudaz, cuya titularidad corresponde a su entonces pareja, Víctor de Aldama.

Las declaraciones de Aldama han sumido a Moncloa en una profunda crisis. Los portavoces de la presidencia han negado rotundamente las acusaciones, con la vehemencia de quien se enfrenta a una situación incómoda e inesperada. Según la versión oficial, Aldama y Ramos no son más que “calumniadores” que buscan salvarse a sí mismos de las consecuencias de sus actos.

Sin embargo, los rumores persisten y varios ministros han dedicado la última semana a revisar sus coartadas, en un intento de anticiparse a posibles complicaciones. La oposición, por su parte, contempla el desarrollo de los acontecimientos con cierto regocijo, como si se tratara del argumento de una película de Almodóvar.

Un líder de la derecha llegó a afirmar, en tono jocoso, que “el PSOE tiene más tramas que Juego de Tronos”. Desde Moncloa, insisten en que todo se reduce a una disputa entre dos antiguos socios que ahora se ven incapaces de justificar su ostentoso patrimonio y sus lujosas posesiones, como mansiones y colecciones de Ferraris.

De reyes del lujo a delatores estelares

Víctor de Aldama

Mientras tanto, Patricia Ramos y Víctor de Aldama parecen adaptarse a su nuevo rol de “delatores estrella” con una mezcla de resignación y pragmatismo. Ante la presión de la justicia y el bloqueo de sus cuentas bancarias, la única estrategia que les queda es colaborar con las autoridades y señalar a otros implicados, con la esperanza de aliviar su propia situación.

Se anticipan nuevas comparecencias, más nombres saliendo a la luz y, quién sabe, quizás incluso la posibilidad de que esta historia se convierta en una serie de éxito en alguna plataforma de streaming como Netflix. Y es que, sin duda, este caso reúne todos los ingredientes para captar la atención del público: lujo, traición, política y personajes extravagantes.

Por el momento, lo único cierto es que Víctor y Patricia han perdido su estatus de reyes del lujo para convertirse en los protagonistas de un drama político que promete mantener a la sociedad española en vilo durante meses.

Según las declaraciones de Aldama, Pedro Sánchez lo “invitó” personalmente al mitin celebrado en La Latina con el objetivo de “agradecerle el trabajo” que estaba realizando en México en relación a los negocios ferroviarios. Afirma, además, que la fotografía que se tomaron juntos no fue un encuentro casual.

Ante la controversia generada, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se vio obligado a comparecer públicamente para responder a las acusaciones. Sánchez calificó a Aldama de “personaje” y “presunto delincuente”, negando rotundamente la veracidad de sus afirmaciones y tachándolas de “falsas”. “Menuda inventada”, declaró, advirtiendo a Aldama de que deberá presentar pruebas que respalden sus palabras. Por su parte, tras abandonar la prisión de Soto del Real, Víctor de Aldama volvió a cargar contra Pedro Sánchez, acusándolo de “mitómano” y sugiriendo que padece “alzhéimer”, ya que, según él, su encuentro no fue fortuito. “Que no se preocupe el señor Sánchez, que va a tener pruebas de todo lo que se ha dicho”, sentenció Aldama.

Las empresas de patricia Ramos: Un entramado societario bajo sospecha

Profundizando en la figura de Patricia Ramos, se revela un complejo entramado societario que la sitúa en el centro de las investigaciones. Ramos no solo administraba empresas con nombres llamativos, sino que su historial empresarial se extiende a diversas sociedades, algunas de ellas ahora bajo la lupa de la justicia. Su rol como administradora única y socia única de Martina 2017 Real Estate SL, desde octubre de 2017, es solo una pieza del rompecabezas. Anteriormente, estuvo al frente de Original London SL, desde octubre de 2015 hasta junio de 2018. También figura como apoderada de Businesscity SL entre abril de 2014 y mayo de 2015. Además, fue administradora única de Deluxe Fortune SL de septiembre de 2012 a marzo de 2013. Estos datos, obtenidos del BORME, dibujan un perfil empresarial activo y diversificado, que ahora es objeto de escrutinio por parte de las autoridades.

La variedad de empresas y los periodos en los que Ramos estuvo al frente de las mismas sugieren una participación significativa en el mundo de los negocios, lo que contrasta con su declaración de desconocimiento sobre el origen de los fondos en sus cuentas bancarias. Este entramado empresarial, junto con las acusaciones de la UCO sobre su papel en el blanqueo de capitales, la convierte en una figura clave en el desarrollo de la investigación y en la trama que envuelve a Víctor de Aldama.


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