La conexión Gaspard-Figueroa: Cómo una venta simulada en Caracas fue el preludio de múltiples fraudes en EE.UU.

Comparte...

Previo a que el venezolano Tito Figueroa C. fuera señalado de múltiples fraudes en EE.UU., usando distintas compañías destinadas a la compra y remodelación de inmuebles; su padre, Tito Figueroa Atías, llevaba una no menos dudosa carrera comercial en Venezuela.

En 2008, Tito (padre), había fungido como testaferro para el venezolano de ascendencia española Arturo Vilar, en una trama en la que Vilar pretendió ocultar la tenencia de un apartamento ubicado en la urbanización La Florida, en Caracas, para así evitar perderlo.

Todo comenzó en 2006, cuando Constructora Arata, una contratista con sede en el estado Aragua, propiedad de los hermanos Rafael y Luis Mejías Umaña, recurrió a una compañía de seguros para la emisión de fianzas de anticipo y de fiel cumplimiento.

La constructora había obtenido un contrato de la Fundación Pro-Patria 2000, una entidad creada bajo la administración de Hugo Chávez, adscrita a la vicepresidencia de Venezuela -entonces bajo el mando de José Vicente Rangel-, destinada al desarrollo de obras de infraestructura.

El contrato otorgado a Constructora Arata tenía como propósito la ampliación en Caracas de la sede de la Contraloría General de la República. Pero dado que la constructora no cumplió con la obra, la Fundación Pro-Patria 2000 demandó a la aseguradora que había emitido la fianza.

Al mismo tiempo, la aseguradora demandó a Arturo Vilar, quien fungió como fiador ante la compañía de seguros. Fue por ello que, en octubre de 2008, Vilar realizó una venta simulada de un apartamento de su propiedad, en la que el comprador era Tito Figueroa (padre).

Menos de 7 meses después, Figueroa (padre) vendió el apartamento a una empresa vinculada a Vilar. Según la aseguradora, en tales ventas no hubo movimiento de dinero, mientras que Vilar y su esposa continuaron ocupando el apartamento.

Tras un acuerdo del que poco se supo, en 2013 la aseguradora desistió de la demanda que había iniciado dos años antes contra Vilar y Figueroa (padre), quien ya para entonces, tras un accidentado paso por empresas ajenas, era también un aventajado contratista estatal.

Aquellos eventos fueron parte de la precuela de los también fraudulentos negocios que Figueroa (padre) y su hijo emprendieron en EE.UU., que han contado con el financiamiento de los ahora fugitivos José y Chamel Gaspard Morell, reveló @josepgonzalez687.



Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *